La prevención de ahogamientos en niños

Nadar, la hora del baño, y jugar en el agua puede ser muy divertido para los niños. Nosotros queremos que los niños esten seguros con sus familias para disfrutar del juego de natación y el agua como parte de un estilo de vida activo y saludable.

El ahogamiento es la segunda causa de muerte relacionada con lesiones entre los niños españoles, tras los accidentes de tràfico. Cada año entre 70 y 150 niños se ahogan, y los más vulnerables son los niños de 1 a 4 años en bañeras y piscinas. Se calcula que el 80% de estos casos se podrían haber evitado, ya que acontecen en piscinas privadas que no cumplen la normativa vigente.

Esto equivale a más de dos aulas llenas de niños. Cada año.

Además, cada año más de 140 niños deben permanecer en el hospital porque casi se ahogan. El casi-ahogamiento puede tener efectos negativos sobre la salud a largo plazo. Puede afectar la manera en que un niño piensa, aprende y juega.

Pero hay algo que se puede hacer para proteger a los niños. La supervisión activa de los niños cuando están cerca o en el agua, cercado de la piscina adecuada, el uso de chalecos salvavidas, la formación de adultos en primeros auxilios y RCP (resucitación cardiopulmonar) y  enseñar a los niños a nadar puede ayudar a prevenir el ahogamiento.

Los riesgos de ahogamiento

En todos los grupos de edad, los niños son más propensos a ahogarse que las niñas. Esto puede ser porque los padres aceptan la asunción de mayor riesgo en niños que en niñas.

Niños menores de cinco años de edad

Todos los niños están en riesgo de ahogarse, pero los niños menores de cinco años de edad corren un riesgo especial debido a que:

- se sienten atraídos por el agua, pero no puede entender el peligro.

- pueden caminar, pero no pueden nadar.

- sus pulmones son más pequeños que los adultos y se llenan rápidamente con agua.

- Pueden ahogarse en tan sólo 2,5 centímetros (una pulgada) de agua.

Niños de cinco a 14 años de edad

- Los niños mayores están en riesgo porque pueden sobreestimar sus propias habilidades, subestimar la profundidad del agua o la fuerza de la corriente, o responder a un reto de un amigo.

- La fuerza física se desarrolla durante la infancia. Incluso un buen nadador puede tener problemas, especialmente en ambientes o aguas desconocidos.

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